Juicio Díaz Bessone: Los alegatos de la defensa
Este miércoles se reanudó el juicio contra Díaz Bessone y otros cinco imputados de crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura en Rosario. El defensor oficial Germán Artola, fue el encargado de iniciar la defensa de los represores.
En el juicio que se desarrolla en el tribunal federal 2 de la ciudad, están imputados además de Díaz Bessone, los policías José Lofiego, Mario Marcote, José Scorteccini, Ramón Vergara y el ex detenido político Ricardo Chomicky, acusado por Ey compañeros de colaboracionista.
La audiencia se demoró en comenzar porque el abogado de Díaz Bessone, Francisco Miño, presentó un recurso porque su defendido habría sufrido un ACV.
El tribunal hizo lugar a la petición, con el voto en disidencia de Vengas Echague, y autorizó el trasladado al Hospital Militar Central de la ciudad de Buenos Aires.
Lo resuelto por el Tribunal motivó la inmediata reacción del fiscal de la causa, Gonzalo Stara, quien interpuso recurso de nulidad contra la decisión de los jueces Baravani y Paulucci por entender que debió darse intervención a la fiscalía antes de decidir y agregó que no puede privilegiarse al imputado con su traslado al Hospital Militar teniendo la posibilidad de recibir atención médica en esta ciudad.
El tribunal rechazó el planteo de la fiscalía y dispuso que se constituya una junta médica para determinar si Díaz Bessone está en condiciones de continuar su sometimiento a juicio.
Tras largas deliberaciones, la audiencia comenzó con el alegato de Artola, quien en primer término, planteó la prescripción de la acción penal por el transcurso del tiempo, ratificó la validez de las leyes de obediencia debida y punto final, y planteó la nulidad de la audiencia de debate por entender que se ha afectado el derecho de la defensa por no haber podido controlar eficazmente la prueba de cargo, ya que en numerosas ocasiones el Tribunal no le permitió interrogar a los testigos.
Hizo referencia también a la legalidad de las detenciones que se les imputan a sus defendidos como privaciones ilegítimas de la libertad por entender que la policía actuó conforme a las leyes vigentes en ese momento y que luego remitía las actuaciones a la justicia militar.
El alegato de Artola y de las demás defensas continuará el próximo martes a las 10.
En el juicio que se desarrolla en el tribunal federal 2 de la ciudad, están imputados además de Díaz Bessone, los policías José Lofiego, Mario Marcote, José Scorteccini, Ramón Vergara y el ex detenido político Ricardo Chomicky, acusado por Ey compañeros de colaboracionista.
La audiencia se demoró en comenzar porque el abogado de Díaz Bessone, Francisco Miño, presentó un recurso porque su defendido habría sufrido un ACV.
El tribunal hizo lugar a la petición, con el voto en disidencia de Vengas Echague, y autorizó el trasladado al Hospital Militar Central de la ciudad de Buenos Aires.
Lo resuelto por el Tribunal motivó la inmediata reacción del fiscal de la causa, Gonzalo Stara, quien interpuso recurso de nulidad contra la decisión de los jueces Baravani y Paulucci por entender que debió darse intervención a la fiscalía antes de decidir y agregó que no puede privilegiarse al imputado con su traslado al Hospital Militar teniendo la posibilidad de recibir atención médica en esta ciudad.
El tribunal rechazó el planteo de la fiscalía y dispuso que se constituya una junta médica para determinar si Díaz Bessone está en condiciones de continuar su sometimiento a juicio.
Tras largas deliberaciones, la audiencia comenzó con el alegato de Artola, quien en primer término, planteó la prescripción de la acción penal por el transcurso del tiempo, ratificó la validez de las leyes de obediencia debida y punto final, y planteó la nulidad de la audiencia de debate por entender que se ha afectado el derecho de la defensa por no haber podido controlar eficazmente la prueba de cargo, ya que en numerosas ocasiones el Tribunal no le permitió interrogar a los testigos.
Hizo referencia también a la legalidad de las detenciones que se les imputan a sus defendidos como privaciones ilegítimas de la libertad por entender que la policía actuó conforme a las leyes vigentes en ese momento y que luego remitía las actuaciones a la justicia militar.
El alegato de Artola y de las demás defensas continuará el próximo martes a las 10.