2º Jornada del juicio Guerrieri-Amelong
Durante la segunda audiencia oral realizada en el marco del primer juicio contra responsables del terrorismo de estado en Rosario –que se desarrolla en los tribunales federales de calle Oroño–, la actividad continuó con la lectura de las acusaciones contra los imputados. El dato fuerte llegó al final de la jornada cuando el presidente del tribunal, Otmar Paulucci, anunció que en Brasil la Interpol había atrapado al represor prófugo Gustavo Bueno (ver nota aparte).
Luego de una jornada histórica cargada de emociones, color y muchísima gente, como la del pasado lunes 31, la de este martes fue una audiencia signada por la tranquilidad. Algunos amigos, familiares y representantes de organismos y gremios realizaron postas de 20 o 25 personas acompañando a la entrada, salida y en los cortes de la audiencia, a los querellantes y abogados que se volvieron a hacer presentes para seguir escuchando las lecturas de las acusaciones.
La audiencia comenzó cerca de las 9 de la mañana y las 11.30 tuvo su primer descanso de quince minutos. Retomó luego hasta las 13.30 y continuó de 15 a 19.30.
Al final de la audiencia el Tribunal comunicó que el juicio continuará el próximo lunes a la 9 de la mañana y que la presidencia ira rotando semanalmente. El lunes 7 de septiembre presidirá el tribunal la jueza Beatriz Caballero de Baravani.
Apostillas.
Los represores Pascual Guerrieri y Walter Pagano pidieron no estar presentes en la sala de audiencia y fueron trasladados a una sala contigua donde siguieron viendo los cargos que se les acusan por Televisión.
Un momento extraño se vivió cuando apareció alguien de la prefectura y dijo al presidente del Tribunal que el represor Costanzo se sentía mal. El juez Paulucci preguntó a Costanzo si efectivamente se sentía mal Costando respondió que “estaba bien”.
En uno de los intervalos de la audiencia varios de los presentes fueron testigos de diferentes actitudes intimidatorias por parte de cuatro de los imputados para con el represor Costanzo –el único que durante el proceso de instrucción de la causa habló, e incluso alguna vez aseguró que se sentía amenazado por los otros–. El tribunal dispuso que Costanzo ingrese a la sala recién cuando la audiencia esté formada.
(En la foto: El represor Pascual Guerrieri)